Disfrute del envío gratuito de DHL en pedidos superiores a $149*

Política de devolución de 30 días Garantía sin objeciones

Iluminando su hogar: luz blanca cálida o fría

Lighting up Your Home: Warm or Cool White Light

¿Deberías instalar blanco cálido en tu casa? ¿O deberías optar por el blanco frío? Seleccionar la iluminación adecuada para una casa rara vez es fácil. Y muchas veces elegimos uno u otro sin pensar en cómo planeamos usar una habitación en particular.

Aquí está la cuestión: diferentes habitaciones de tu casa tienen diferentes requisitos. No es probable que la iluminación adecuada para un dormitorio principal funcione en una cocina.

Antes de comenzar a comprar iluminación para el hogar nueva, considere dos cosas:

  • ¿Qué habitaciones quieres iluminar realmente?
  • ¿Cómo puedes iluminar estos espacios de la manera más efectiva?

Elegir la iluminación adecuada para el hogar es fundamental y puede contar con nosotros para ayudarle. En esta publicación, lo ayudaremos a elegir entre luz LED blanca cálida y fría.

Diferentes espacios del hogar necesitan una iluminación diferente

Como se dijo antes, la iluminación que utilice para una habitación en particular debe ser apropiada para las actividades que se llevarán a cabo allí. Por este motivo, debes considerar las necesidades de iluminación de cada estancia de tu casa por separado.

En términos generales, necesitamos luz LED blanca cálida o fría para nuestras habitaciones. Algunos espacios requieren luz LED blanca cálida, mientras que otros necesitan luz blanca fría.

Luz blanca cálida o blanca fría

La luz blanca cálida o blanca fría se refiere a la temperatura de color, medida en Kelvin (K), de la luz. En otras palabras, se refiere a cómo percibimos la luz emitida.

Los ojos humanos perciben la luz cálida como un tono ámbar, muy similar al color de las viejas bombillas incandescentes, que ya casi nadie usa porque desperdician cerca del 80-90% de la electricidad que consumen.

La luz cálida es más adecuada para aquellas estancias en las que nos gustaría un ambiente acogedor, como un salón o un dormitorio. Este tipo de luz genera calidez y a su vez hace que los espacios parezcan relajantes y acogedores. Pero eso no es todo. La luz blanca cálida también puede resaltar acertadamente detalles arquitectónicos como la decoración.

El ojo humano, por el contrario, percibe la luz fría, como tonos azules. La luz fría y cálida funciona maravillosamente bien en áreas de trabajo, donde la claridad es el requisito clave.

Por ejemplo, un estudio, una cocina, un garaje o una oficina en casa son buenos candidatos para una iluminación blanca fría. También puedes utilizarlos en baños. La luz fría y cálida ayuda a una mejor concentración.

Otra cosa importante a tener en cuenta es que también puedes utilizar ambos juntos. De hecho, usar luces blancas cálidas y blancas frías juntas de la manera correcta puede ayudar a prevenir sombras irritantes. También puede ayudar a garantizar que no haya demasiada luz en un área en particular.

Conclusión

La luz blanca cálida funciona bien en dormitorios y salones. La luz blanca fría, por otro lado, es más adecuada para zonas donde quieres ver claramente lo que estás haciendo, como una cocina o un garaje. En zonas polivalentes, incluso puedes utilizar ambos para crear un mejor ambiente.

Preguntas frecuentes

¿La luz blanca es buena para el dormitorio?

La luz blanca suave (2700 – 3000 K) es una excelente opción para los dormitorios. Esta luz crea una atmósfera cálida y acogedora, que a su vez se adapta a salas de estar, dormitorios y estudios.

¿Se puede mezclar el blanco cálido y el frío?

Por supuesto que puedes. De hecho, los expertos recomiendan usarlos juntos en determinados espacios, como la cocina. La luz cálida en una cocina puede verse genial durante el día (especialmente si tu cocina recibe un poco de luz solar), pero por la noche puedes apagarla y usar luz blanca fría para mayor claridad.

¿Qué color de luz es el más cercano a la luz del sol?

Si desea bombillas LED que emitan una luz similar a la luz solar, preste atención al índice de reproducción cromática o CRI. Se mide en una escala del 1 al 100 y cuanto mayor sea la calificación, mejor será la calidad de la luz. Por lo tanto, una bombilla con un CRI cercano a 100 le brindará una luz que imita fielmente la luz del día. Por este motivo, le recomendamos comprar bombillas LED con clasificación CRI 90+.